El perro, entusiasmado, comenzó a mover la cola y a levantar sus orejas poco a poco, y, curiosamente, los 1000 perros hicieron lo mismo. Posteriormente sonrió y le ladró alegremente a uno de ellos. El perrito se quedó sorprendido al ver que los 1000 perros también le sonreían y ladraban alegremente con él.
Cuando salió del cuarto se quedo pensando para si mismo:
- ¡Que lugar tan agradable! ¡Voy a venir mas seguido a visitarlo!
Tiempo después, otro perro callejero entró a la misma casa y se encontró en el mismo cuarto. Pero, a diferencia del primero, éste, al ver a los otros 1000 perros en el cuarto, se sintió amenazado, ya que lo estaban mirando de una manera agresiva. Posteriormente empezó a gruñir, e inmediatamente vio como los 1000 perros le ladraron también a él del mismo amenazante modo.
- ¡Que lugar tan horrible es este! ¡Nunca mas volveré a entrar allí!
En la fachada de dicha casa se encontraba un viejo letrero que decía:
No somos responsables de la cara que tenemos, somos responsables de la cara que ponemos. Y, no cabe duda que recibimos lo que damos.
Cuento Zen, Autor desconocido
12 comentarios:
Muy buena la historia. Es cierto que recibimos lo que nosotros mismos generamos.
Hablando de los perros, estoy siguiendo por Animal planet, un programa llamado "El encantador de perros", en el que César, un mexicano que adora a los perros y sabe cómo tratarlos, visita familias que tienen problemas con sus perritos, para asesorarlos.
Es increíble cómo en pocos minutos
con una buena actitud, los perros modifican su conducta agresiva.
En mi casa vemos el programa porque ha resultado interesnte, ya que excede el comportamiento de las mascotas. se encuentra reflejada la conducta de los hombres en cada episodio.
Tu post lo he relacionado con ésto.
En tu blog tú emites "buena onda" como decimos los argentinos, es decir buena energía, y eso es lo que recibirás de tus visitantes y amigos.
Un beso!
Me acabas de recordar este relato y es verdad la razón que tiene. Tu energia positiva atrae energia positiva y la negativa a la negativa.
Asi que hay que sonreir lo maximo (meridio) posible y disfrutar de un buen dia.
saludos!!
Qué bello lo que posteaste hoy.
Qué sabio.
Y cuánta lectura entrelíneas.
No conocía el cuento.
Me lo llevo en el alma.
Un beso , Gladiador ...
Muchas personas se quejan siempre de lo que reciben, sin reparar que es su comportamiento el que genera esa cosecha, se recoge lo que se siembra, y el que siembra vientos...ya se sabe lo que recoge.
Me encanta este cuento, lo conocí hace poco, me agrada volver a encontrarlo, siempre es bueno pararse a reflexionar sobre nuestas actitudes.
Un saludo.
GRACIELA Aquí también lo emitieron hace un tiempo y es curioso ver, como dices, el comportamiento de los dueños a veces peor que el de los perros. Seguro que en “Perroland” hay un programa titulado “El encantador de humanos”, los canes aullarán asombrados.
Lo de la buena onda y energía positiva en el blog es recíproco entre vosotr@s mis amigos y yo. Es un lujo y una suerte. Intentaré no bajar el listón.
Gracias.
J. WILLEM Lo malo es cuando vamos con una sonrisa de oreja a oreja y a pesar de ello nos encontramos con algún indeseable que nos ladra y nos la borra de un plumazo.
SIL Si la lectura entre líneas es con una sonrisa, mucho mejor. La prueba, siempre tus positivos comentarios.
MARGA Sonríe sin motivo, pero con sinceridad, porque tampoco hay motivo para dejar de hacerlo.
Que cosa más bonita la que has publicado, no conocía esa historia y me ha gustado mucho, se la contaré a mis pequeñas en cuanto tenga oportunidad.
Besos!
Me encantó la historia! Vamos espejándonos en los demás de modo permanente, y vemos reflejado aquello que muchas veces negamos en nosotros. Proyección que le dicen... "Sombra" le llamaba Jung.
Estas entradas hacen pensar querido Máximo Décimo. Gracias!
SIMONE Seguro que a tus peques les gusta este cuento de perritos, ya me contarás.
Besos.
LILI Cuando paso delante de un espejo y tengo mala cara o estoy de mal humor intento hacer una mueca en plan “payasete” y al final acabo riéndome yo sólo. ES un buen ejercicio.
El pobre Conde Drácula siempre estará de mal humor. Jejeje!!!
Un día me dijeron: "si no te gusta lo que recibes, observa lo que emites". Esta historia es un claro ejemplo. Fuerza y Honor Máximo.
ANTONIO "Cuando apuntas con un dedo, recuerda que los otros tres dedos te señalan a ti. - Proverbio Inglés".
Vis et Honor!!
Que moraleja más bonita...aunque a veces las cosas no son tan sencillas...
Un besito
El comportamiento de los animales nos enseña muchísimo.
Ellos no nos mienten.
Si nos dan,no halagan y después locamente clavan
un puñal. Como el ejemplo de Elio.No los come
pero no aprende de ellos. Pascuali de Maria.
Publicar un comentario